El embarazo en la adolescencia no solo perjudica la vida de los jóvenes como también trae consecuencias para sus hijos. La frustración por tener la juventud abortada por la responsabilidad de cuidar de un bebé lleva a que los hijos de mujeres adolescentes sufran más violencia doméstica. Es una interesante conclusión de un estudio sobre el maltrato infantil de la Asociación para el Desarrollo Integral para Personas Violadas AC (ADIVAC).

En México, cada año, nacen en promedio dos millones 500 mil niños, de los cuales cerca de 20 por ciento son hijos de madres adolescentes, y en este grupo se estima que un diez por ciento de los embarazos derivan de abuso sexual, por lo que esos niños tiene más posibilidades de  ser víctimas de violencia de unos padres jóvenes que sufrieron abusos.

Las principales razones o causantes para que los niños sufran violencia en su núcleo familiar son los problemas económicos, elevado número de integrantes de la familia, la educación de los padres y que éstos sean adolescentes. Los abusos son más frecuentes entre los  adolescentes  con  menores índices de educación y por tanto presentan problemas económicos. Estos factores, aunados a la inmadurez, provocan mayor incidencia de agresión contra los menores.

Padres adolescentes de hijos maltratados

En el informe de la  ADIVAC indicaque en un considerable número de casos registrados en México, en más de 40 por ciento la madre es la agresora de los hijos y en 25 por ciento es el padre, quienes no demuestran remordimiento pues consideran que el castigo físico es una forma de educar.

Ante esta actitud, de acuerdo con una consulta nacional, 47 por ciento de los niños señalaron que son agredidos porque sus padres desconocen los derechos de los niños, y 39 por ciento indicaron que los adultos desquitan su violencia y mal humor contra sus hijos pequeños.